
El wing Shane Williams marcó su 10º try en RWC para Gales.
AUCKLAND, 22 de octubre - Dos incondicionales de la Copa del Mundo de Rugby tuvieron su final durante el partido por el tercer puesto, este viernes en el Eden Park.
Hubo suerte dispar para para el wing de Gales, Shane Williams y el segunda línea de los Wallabies, Nathan Sharpe, tras el resultado 21-18 a favor de Australia.
Sharpe, quien jugó su test match número 100, dejó el campo de juego a los cinco minutos de la segunda parte, después de sufrir una lesión en la pierna cuando cayó desestabilizado de un line. Por su lado, Williams, de 34 años, anotó su 57º try en un test, el tercero del torneo, en la gran campaña que hizo Gales.
Su compañero de equipo, Mike Phillips, rindió homenaje al wing, que marcó un récord de 10 tries en partidos de RWC para Gales, siendo el tercer máximo tryman. "Él es uno de los mejores jugadores del mundo y uno de los mejores jugadores con los que jugué", dijo el medio scrum. "Es un genio en la cancha y hace magia. Él es el tipo de jugador que los aficionados quieren venir a ver".
Espíritu fantástico
Williams dijo que esta tercera RWC fue la mejor para él. "Fue tremenda, por el espíritu y el clima de todo el plantel, que fue fantástico", dijo el wing de 1.70 mts.
"Somos un grupo de gran orgullo que está decepcionado por no haber ganado. Queríamos dar lo mejor esta noche. Nos dijimos que debíamos salir en la segunda mitad para darlo todo, pero simplemente esta noche no pudo ser".
Sharpe, de 33 años, que también disputó su tercera Copa del Mundo, fue incapaz de ofrecer lo mejor de sí, como resultado de su lesión. "Pensé que tenía que salir antes, pero me las arreglé para llegar hasta el final de la primera mitad", dijo la segunda línea. "En el descanso, dejé de correr y no tuvo más remedio que abandonar el campo".
El segunda línea es el único miembro del equipo que jugó en la derrota de la final en la RWC 2003 ante Inglaterra, dijo que los Wallabies estuvieron decididos a dejar atrás la caída ante los All Blacks en la semifinal del fin de semana pasado.
"Por el torneo que hicimos, teníamos muchas ganas de terminar con un buen resultado", dijo. La figura del partido, Berrick Barnes admitió que el logro de Sharpe también fue un incentivo importante.
"Tuvimos un buen partido hoy", dijo. "Jugamos por el orgullo y por el partido número 100 de Nathan Sharpe. No es lo ideal perder en semifinales, pero aportamos nuestro granito de arena y hemos hecho lo mejor posible esta noche".