Scelzo, un histórico en un rol nuevo

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Por Patricio Connolly
Scrum.com

APScelzo, uno de los históricos de estos Pumas

WELLINGTON -- Dentro del plantel de los Pumas que está viviendo el Mundial de Nueva Zelanda, cuatro son los jugadores históricos y más referentes. No sólo por la edad que marcan su documentos, sino también por los Mundiales y tests que cargan sobre sus espaldas: ellos son Mario Ledesma, Felipe Contepomi, Rodrigo Roncero y Martín Scelzo. Este último, con pasado en Hindú y futuro en el Agen francés por dos años, está en un rol distinto al de sus compañeros de batallas. El primera línea, de 35 años, no es titular y en su lugar juega Juan Figallo, 12 años menor que él.

Todo parecía indicar que esa inolvidable primera línea de Francia 2007 se iba a repetir en la tierra de los All Blacks, pero en el test con Gales en agosto se vio que el entrenador Santiago Phelan tenía un cambio pensado. Pese a su juventud y pocos tests, Tati se la jugaba por Chipi. Y Scelzo lo entendió. "Hay que sumar desde la posición que a uno le toca", dice, con su barba tupida y esa estampa que le da la experiencia para afrontar las preguntas incómodas.

- ¿Cómo estás llevando en lo personal este Mundial, que no es como el anterior en el que eras titular indiscutido?
- -Bien. Me enorgullece que Chipi esté jugando de esta manera. Así que es bueno para el equipo. Todos los que estamos acá es para sumar, no para decir soy titular, suplente o afuera. Es para lo mejor del plantel que es clasificarnos.

El tema sigue dando vueltas en la sala del Amora hotel, ubicado en el corazón de Wellington. "A ninguno le gusta estar de suplente, hay que ser sincero. Ni estar en ésta posición, pero hay que aceptarla. Es una decisión de los entrenadores. Está dando resultados Chipi. Si yo estuviera en un punto más alto en lo rugbístico sería titular", explica. Lejos de polemizar, habla bien de su compañero: "Nos complementamos bien. El siempre me pregunta, trato de aconsejarlo y ayudarlo. Hablamos de las virtudes y defectos de cada uno. No por ser experimentado tenemos que ser cerrados y no escuchar a los demás. Es un chico que recién está empezando una carrera internacional y es un gran jugador".

Desde que los Pumas llegaron a Nueva Zelanda ya pasaron 19 días y es la primera vez que Scelzo se paró frente a los grabadores. Con una sonrisa y disfrutando de su cuarto Mundial, aunque sea de un lugar distinto y no como protagonista principal, como fue en los anteriores. Por eso, en la previa de un duelo trascendental como este con Escocia, su palabra vale. "Esta es la semana más importante para nosotros. Es la que va a definir todo para este equipo, si vamos a tener chances o no para clasificarnos. Linda, pero tenemos que tener las luces prendidas", cuenta.

- Los escoceses dicen que si uno lee los medios neocelandes, el favorito es Argentina, ¿vos qué pensás?
- Tengo ganas de decir que somos nosotros, pero los partidos hay que jugarlos. Duran 80 minutos y favorito va a ser el que lo gane.

- Después de estos dos primeros partidos que jugaron ambos seleccionados, ¿te parece que llegan mejor los Pumas?
- Son partidos aparte en un Mundial. Hay que estar al 200 por ciento, y este va a ser uno más así.

Scelzo fue uno de los que hace cuatro años festejó a lo grande en el Stade de France, cuando los Pumas eliminaron a Escocia. Así y todo, no cree que los jugadores del Cardo lo vivan como una revancha de aquel glorioso 7 de octubre para Argentina. "Ellos están viendo más los últimos dos triunfos contra nosotros que el partido del Mundial pasado. Nosotros queremos hacer lo mejor posible y corregir lo de esos encuentros", asegura. De esos tests en 2010, Scelzo considera que los Pumas están mejor. "Cerramos algunos errores que cometíamos en los partidos. Estamos haciendo encuentros más serios y llevamos a los rivales a lo que queremos nosotros. Se siguió una línea de juego", dijo.

- Por como se dio el fixture es la ultima oportunidad para los Pumas, y Escocia si pierde tiene una chance más con Inglaterra, ¿es una ventaja o desventaja para la cabeza?
- No sé, es la realidad y hay que aceptarla así. Nosotros tenemos en la mente que vinimos a jugar siete finales. Pasaron dos y esta es una más. Que sea lo que Dios quiera.

Así, con una sonrisa y pidiendo que no lo molesten más con la barba, se va Scelzo. Antes de abandonar el lobby del Amora para seguir la vida Puma, deja un pedido: "Hay que engualicharlo a Dan Parks. Sabemos que él es un gran pateador y tenemos que tener cuidado con los penales. Ojalá que si juega él tenga una mala noche como la están teniendo los pateadores". Es su último Mundial, y lo único que quiere es disfrutar y ver a los Pumas en lo más alto. Todo lo demás, hoy está en un segundo plano.