Graham Henry quiere dar vuelta de página y pensar en la final.
AUCKLAND, 17 de octubre – Mientras la mayoría de la gente en Nueva Zelanda continúa disfrutando de la victoria de los All Blacks sobre Australia, el entrenador Graham Henry está tratando mantenerse calmo.
El país anfitrión consiguió llegar a la final de la Copa Mundial de Rugby 2011, gracias a lo que el entrenador señaló como un "heroico" rendimiento. Pero ahora la mirada de Henry está puesta firmemente en el enfrentamiento de los All Blacks con Francia en el Eden Park.
"Creo que es muy importante poner los pies sobre la tierra", dijo el entrenador. "Fue un gran partido el fin de semana, pero no podemos quedarnos con eso”.
"Creo que tenemos que volver a las bases una vez más, dar vuelta de página y empezar de nuevo para este test del domingo contra los franceses, porque aunque no jugaron muy bien en la semifinal, sabemos que tienen la capacidad de jugar extraordinariamente y lo hicieron en el pasado".
Francia apenas pudo superar a un equipo galés que jugó con 14 hombres, pero la historia se ha encargado de mostrarle a los All Blacks lo buenos que pueden ser Les Bleus, especialmente en las Copas del Mundo.
"Los All Blacks tuvieron algunos grandes partidos contra los franceses, durante los últimos ocho años", dijo Henry.
"Comenzando con el test en París en 2004, que fue un partido que mostró al mundo a varios de estos jóvenes, los cuales mucho de ellos ya han jugado 70, 80, y 100 partidos con los All Blacks”.
Los cuartos de final que mostraron la realidad
"En 2007, después de vencer a los franceses por 50 puntos, nos dieron una paliza en los cuartos de final. Esa fue la realidad", dijo el entrenador kiwi.
Pasaron 24 años desde que Francia y Nueva Zelanda se enfrentaron en una final de RWC, cuando los All Blacks ganaron 29-9 para convertirse en el primer equipo en levantar la Copa Webb Ellis.
Pero mientras que los neozelandeses esperan repetir la final de 1987, Henry sabe que sus hombres deben hacer algo más que esperar para volver a alzar el máximo trofeo.
"El equipo francés, puede ser el mejor del mundo ese día", dijo Henry. "Tenemos que dar vuelta de página y trabajar toda la semana, poco a poco, lentamente. Hay que ir aumentando nuestra claridad y actitud a medida que se acerca el domingo”.
"Si lo hacemos rápidamente solo nos vamos a poner más ansiosos. Tenemos que usar los seis días que tenemos que hacer bien el trabajo y no apresurarnos”.
"Hay mucha historia en juego. Los chicos respetan al equipo francés, porque tienen muchos jugadores con gran talento y será una buena final."
